Hay algunas ideas preconcebidas sobre buceo que creemos que es mejor clarificar. Quizá estas explicaciones te ayuden a convencer a tu mejor amigo o amiga de que es el momento de certificarse o para asegurarle a tu madre que no es la “locura” de deporte que se piensa que es.
1. Ataques de tiburón
Una de las principales preocupaciones que nos llegan de los no buceadores es que los tiburones les asustan. Sin embargo, en general los tiburones apenas suponen un riesgo para los buceadores o para los humanos. Solo unos 5 humanos fallecen al año en todo el mundo por ataques de tiburón, mientras que los humanos sacrifican unos 100 000 000 tiburones al año. De hecho, bastantes personas que empiezan a bucear suelen estar nerviosos entre tiburones y rápidamente se convierten en unos de sus mayores defensores. Incluso las pocas personas que han experimentado ataques suelen ser defensores de los tiburones, como es el caso del PADI AmbassaDiver, Mike Coots.
Y si nada puede calmar tus nervios, es bueno saber que existen un montón de inmersiones increíbles que conllevan muy poco o ningún riesgo de encuentros con tiburones. Por ejemplo, los cenotes mejicanos de agua dulce son uno de nuestros lugares de buceo preferidos y allí no encontrarás tiburones.
2. Necesitas viajar lejos para bucear
Mucha gente piensa que necesita viajar a destinos tropicales lejos de casa para poder bucear. Y aunque esos destinos de ensueño definitivamente te proporcionarán inmersiones increíbles, hay algo que vale la pena ver independientemente de donde vivas. Las aguas frías tienen mucho que ofrecer, desde plataformas petrolíferas a bosques de algas. Incluso aunque no estés cerca del océano, hay un montón de lagos y canteras que ofrecen experiencias de buceo únicas. Puedes usar el localizador de centros de buceo para encontrar centros cerca de ti y ver dónde bucean, o echa un vistazo a nuestra página Vacation Spotlight para ver las posibilidades de buceo disponibles en la parte del mundo en la que vives.
3. Hacer snorkel es lo mismo
La mayoría de la gente nunca ha probado el buceo pero el snorkel es mucho más común. Alguna gente que solo ha probado el snorkel puede pensar que es una experiencia similar. Nos hemos dado cuenta de que hay dos maneras en las que los no buceadores interpretan este mito. En primer lugar, alguna gente cree que el snorkel es “tan bueno” como el buceo. Esto es algo con lo que nosotros no estamos de acuerdo. Aunque el snorkel es algo estupendo, es un deporte más de espectador que la inmersiva experiencia que ofrece el buceo. Estar completamente sumergido y ligero es una experiencia completamente diferente que flotar en la superficie. Si eres de los que les gusta hacer snorkel pero no te interesa el equipo extra que requiere el buceo, te recomendamos el curso PADI Freediver como la manera de aprovechar al máximo tus experiencias en el océano.
En segundo lugar, hay gente a la que no le gusta el snorkel, por lo general debido a que no les gusta respirar mediante el snorkel, y asumen que el equipo de buceo es igual. De hecho, es mucho más natural respirar mediante un regulador. La mayor parte de los buceadores dicen que los reguladores son cómodos y naturales, lo que implica que te puedes “olvidar” de que estás respirando mediante un snorkel. Si no has tenido la oportunidad de probar el equipo de buceo, te recomendamos que busques un programa Discover Scuba Diving cerca de ti. Te sorprenderá lo cómodo que es el equipo en el agua.
4. El buceo es un deporte de hombres
Algunas mujeres nos han comentado que evitan el buceo porque les parece que está destinado a los hombres y que hay pocas mujeres buceadoras. Y aunque solía ser el caso de que casi el 90 % de los buceadores eran hombres, el buceo cada vez está más equilibrado y 1/3 de los buceadores son mujeres. Además, las mujeres que viven en lugares de clima frío están de enhorabuena, pues contamos con una capa de grasa bajo nuestra piel que mantiene a las mujeres más calientes que los hombres en el agua. ¡Nacimos para esto! PADI celebró hace poco el tercer Día del Buceo de la Mujer, un evento que pretende reducir la brecha de género en buceo.
