A veces necesitamos algo que nos motive. Aquí van algunas maneras en las que el buceo puede proporcionarte el antídoto para los altibajos de la vida y ayudarte a sentirte bien contigo mismo otra vez.
Relajación
Asumiendo que no te sumerges en una sardine run en busca de desafíos emocionantes, el mundo bajo el agua tiene un increíble efecto tranquilizante en la mente. Para muchos el océano es un destino para escapar del ajetreo de la vida diaria. Es un lugar tranquilo donde los teléfonos, las bandejas de entrada y las preocupaciones domésticas están a miles de kilómetros; tu mente se centra en la vida marina y corales y colores. Si deseas llevar tu paz interior al siguiente nivel, prueba la meditación subacuática en tu próxima inmersión.
Conexión
Desde reunirte con tu compañero de buceo y compartir historias de buceo con otros a impresionar a aquellos que no bucean con emocionantes historias sobre el océano, con el buceo puedes explorar intereses comunes y forjar conexiones con aquellos que te rodean de manera garantizada.
Recompensa
Como aquellos que han progresado con sus cualificaciones profesionales sabrán, es increíblemente satisfactorio enseñarles a otros a bucear. La mirada en la cara del estudiante cuando desciende por primera vez, ven su primera tortuga, o finalmente dan el clavo con el control de flotabilidad no tiene precio. Todos los PADI Pros conocen la sensación placentera que se tiene al ayudar a alguien a superar su miedo, o iniciar su carrera. Convertirse en PADI Instructor puede traer grandes recompensas para buceadores que quieran devolverle al deporte que les apasiona.
Propósito
Si unes tus destrezas con una causa mayor (como la limpieza de residuos marinos, o el rescate de animales marinos), sabrás que estás ayudando a la protección de los océanos para generaciones futuras. Es algo increíble para el planeta Tierra y sin duda va a hacer que te sientas muy bien contigo mismo.
Cura
El buceo no solo es una manera de relajarse después de una semana ocupada; puede promover el bien estar a un nivel aún más profundo, físicamente y mentalmente. El PADI AmbassaDiver Gary Green, superó un desorden por estrés post traumático al descubrir el mundo subacuático.
P.T. Hirschfield, diagnosticada de cáncer terminal hace tres años, habla sobre cómo el buceo le hace sentirse viva: ” el buceo me dio la motivación para mejorar; la idea de estar bajo el agua me incentivó a no desistir, encerrarme y morir, como dijeron que podría pasar.”
Educación
Cada vez que preparamos el equipo y saltamos al agua, aprendemos; y no solo cuando realizamos cursos PADI. Cada minuto bajo las olas es una oportunidad para descubrir nueva vida marina, explorar nuevos pecios, perfeccionar nuestras habilidades fotográficas, o incluso absorber inspiración y consejos de un compañero de buceo. Al aprender, expandimos y enriquecemos nuestras mentes; y esa es una manera rápida para sentirse en la cima del mundo. Si buscas algo que te haga sentir bien en tu vida, visita al PADI Dive Center o Resort más cercano y empieza a bucear.